La eliminación de lunares en Miami es una intervención sencilla y muy habitual. En Plastic Surgery Boutique le ofrecemos un servicio de calidad y personalizado, profesionales especializados con años de experiencia bajo el liderazgo de la Dra Anne Sophie Lessard y por supuesto, un trato cercano.
Si le interesa llamenos para que podamos ofrecerle una cita y comentar las diferentes opciones para la extirpación del lunar o lunares.
La eliminación de lunares es un proceso ambulatorio muy sencillo. No requiere anestesia general ni regional, como norma. Además, el paciente será consciente durante todo el proceso. Lo más habitual es que se duerma la zona sobre la que se va a realizar la extirpación del lunar. Luego se hace un corte y tras este, se elimina el lunar. Lo habitual es que quede una cicatriz. En ocasiones para rellenar la zona se pueden usar injertos de piel. No obstante, en la actualidad también es común eliminar los lunares con láser.
En principio, no hay motivos para la eliminación de lunares salvo que el dermatólogo determine que son lunares peligrosos, es decir, que ahora o en un futuro podrían provocar complicaciones. También si es una persona que ha padecido o padece cáncer de piel habrá que extremar la precaución. No obstante, si es seguro, una simple razón estética podría bastar para realizar la extirpación de un lunar, ya que se trata de un proceso sencillo.
Usted no tiene que someterse a ningún tipo de preparación para la eliminación de lunares en Miami. Es una operación ambulatorio sencilla, dura poco tiempo y apenas notará molestias o dolor. Además, el postoperatorio es breve.
La cirugía de extracción de lunares es muy habitual, por lo que no tiene nada de qué preocuparse. Por un lado se puede realizar mediante la exéresis o bien mediante láser. la primera es más habitual. Simplemente consiste en dormir la zona de la piel cercana al lunar, traspasar la piel unos milímetros y retirar el lunar y por último, echar puntos, los cuales rara vez dejan cicatriz. No obstante, en los días posteriores debe evitar los rayos solares sobre la zona. Incluir una tirita y aplicar crema unas semanas después son unas buenas recomendaciones.
La recuperación es muy rápida, en torno a los 5 días podrá retirar cualquier capa que protegiera al lunar de los rayos UV y hacer su vida normal. Además, no presentará dolor o molestias.
Hay muchos motivos por los que debería hacerse la eliminación de lunares en Miami. No obstante, esto deberá recomendárselo su médico especializado o dermatólogo. También puede acudir a nuestra clínica y nosotros le recomendaremos el mejor tratamiento.
Como norma general, estos son los factores para extirpar un lunar:
Si cumple algunos de estos requisitos u otros, lo mejor es que llame a nuestra clínica y le reservaremos una cita.
En principio ninguna persona debería evitar la eliminación de lunares si ha sido recomendada por su médico o especialista.
El precio de la eliminación de lunares en Miami puede variar mucho dependiendo de la técnica que se utilice. Para su caso, le recomendamos que se ponga en contacto con nuestro centro y reciba un presupuesto personalizado.
Como norma general, el proceso rara vez dura más de una hora, salvo complicaciones inesperadas. Y es muy habitual que dure entre 30 y 40 minutos.
No existe ningún riesgo en la eliminación de lunares. No extirparlo cuando se ha recomendado si podría ser un riesgo mayor con el paso de los meses.
Pero en la extirpación no surgen jamás inconvenientes graves.
Respecto a la técnica existen dos principales. Por un lado, la eliminación por láser, y por otro, la extirpación mediante unos pequeños cortes que apenas dejarán cicatriz.
Estas son las preguntas que realizan nuestros pacientes más frecuentemente:
No, en absoluto, ni durante ni después. Solo podrá notar leves molestias en el postoperatorio, pero no ocurre siempre.
Cuando se lo recomiende su dermatólogo o médico de cabecera. También cuando perciba cambios en su color, forma, tamaño… o le resulte doloroso.
En general, los dermatólogos pueden hacer un diagnóstico más preciso de la situación de un lunar y decidir si conviene removerlo. En un diagnóstico casero, es posible identificar lunares sospechosos si estos tienen formas o colores extraños, o cambian a lo largo del tiempo.
La cirugía de remoción de lunares es sumamente sencilla y no conlleva riesgos. Se realiza con anestesia local en muy poco tiempo. En definitiva, el mayor riesgo está en no remover un lunar que ha sido identificado como sospechoso, porque puede derivar en una enfermedad importante en la piel.
Dependiendo del tamaño del lunar removido, la cicatriz tendrá aproximadamente el mismo largo. Se trata de una pequeña incisión, que consta de uno o dos puntos, y que va disminuyendo su visibilidad con el tiempo, siempre que se realice la curación correcta.
En general esto no sucede: una vez eliminado, el lunar no vuelve a aparecer. Sin embargo, si se trata de un lunar cancerígeno puede llegar a regresar y propagarse si no es tratado correctamente y lo antes posible.