Dentro del mundo de las cirugías estéticas, existen muchas posibilidades y técnicas diferentes. En algunos casos, para tratar una misma parte del cuerpo se pueden contemplar varias opciones. La abdominoplastia, también conocida como “cirugía estética de abdomen”, y la liposucción son dos intervenciones quirúrgicas con similitudes, pero bastante diferentes entre sí. Ambas tienen por objeto modificar el aspecto del vientre para conseguir un aspecto más plano, más firme y más pequeño. Sin embargo, en lo que respecta a la intervención, el tiempo de recuperación y los riesgos, existen algunas diferencias clave entre ambas. Para saber cuál es la diferencia entre una abdominoplastia y una liposucción y averiguar qué procedimiento es mejor para usted, elaboramos esta entrada de blog con todas las respuestas.

¿Cuál es la diferencia entre una abdominoplastia y una liposucción?

Ambas intervenciones, realizadas por cirujanos plásticos, pretenden que su vientre parezca más plano, más firme y más pequeño. Pero los procedimientos son diferentes y tienen distintos riesgos y resultados. En líneas generales, podemos distinguir las intervenciones definiendo las principales características:

• La liposucción elimina los pequeños depósitos de grasa del cuerpo que se encuentran en las caderas, los muslos, el trasero o el estómago.
• La abdominoplastia elimina el exceso de grasa y piel, que no puede solucionarse con dieta y ejercicio.

¿A quién va dirigido?

Los dos procedimientos están dirigidos a personas con objetivos estéticos similares, pero hay diferencias en cuanto a la cicatrización y el grado de evasión. Para saber cuál es la diferencia entre una abdominoplastia y una liposucción, resulta interesante considerar en qué casos se recomienda cada uno. 

Abdominoplastia

Además de eliminar el exceso de grasa de la zona abdominal, la abdominoplastia también elimina el exceso de piel. Cuando se está embarazada o se ha tenido un cambio importante de peso, la piel del abdomen y de su contorno puede estirarse. La abdominoplastia puede utilizarse para recuperar el aspecto plano y contorneado del abdomen, al volver a unir los músculos rectos abdominales si se han estirado o separado, lo cual es frecuente. Sin embargo, este procedimiento no es para todo el mundo. Es posible que desee reconsiderar una abdominoplastia si:

• Tienes un IMC superior a 30.
• Esperas quedarte embarazada en el futuro.
• Estás intentando perder peso.
• Padece una cardiopatía crónica.

Liposucción

Una vez anestesiada la zona del estómago, el cirujano realizará una serie de pequeñas incisiones alrededor de los depósitos de grasa. A continuación, se introducirá un tubo fino bajo la piel para aflojar las células grasas y se utilizará una aspiradora médica para succionar la grasa desalojada, creando como resultado un vientre más plano. Cabe señalar que este procedimiento puede requerir varias sesiones para alcanzar el resultado deseado.

Los resultados: cuál es la diferencia entre una abdominoplastia y una liposucción

Considerando los resultados, cuál es la diferencia entre una abdominoplastia y una liposucción no está muy claro, ya que ambos producen el mismo resultado: un vientre más plano. Sin embargo, una suele ser más duradera que la otra…

Tras una abdominoplastia, los resultados suelen ser permanentes. La intervención ayuda a fortalecer los músculos abdominales, lo que contribuye a reforzar la pared abdominal. El exceso de piel que se ha eliminado no volverá a aparecer a menos que su peso fluctúe o se quede embarazada.

Por otro lado, las personas que se someten a una liposucción en el abdomen esperan ver un abdomen más plano y proporcionado tras la recuperación. Se dice que estos resultados son permanentes; sin embargo, si aumenta de peso en el futuro, la grasa volverá a acumularse en su cuerpo, aunque no siempre en las zonas que se succionaron.

Posibles complicaciones en cada cirugía

Como con cualquier tipo de cirugía, existen posibles efectos secundarios y complicaciones que debes conocer. Las complicaciones también forman parte de cuál es la diferencia entre una abdominoplastia y una liposucción.

Abdominoplastia

Se ha demostrado que los procedimientos de abdominoplastia conllevan más riesgos de complicaciones que otros procedimientos estéticos. Según un estudio concreto, las complicaciones de la herida y las infecciones se encontraban entre los motivos más frecuentes de reingreso hospitalario de los pacientes. Otros posibles riesgos son cambios en la sensibilidad, la acumulación de líquido y, en menor medida, necrosis tisular. Sin embargo, todos los riesgos se minimizan cuando el procedimiento lo realiza una persona experimentada. La doctora Anne-Sophie Lessard es la más capacitada para realizar este tipo de procedimientos.

Liposucción

Como es lógico, el riesgo de complicaciones en la liposucción aumenta si el cirujano opera una zona extensa del estómago. Algunos de los posibles riesgos son el entumecimiento, las irregularidades del contorno y la acumulación de líquido. Además, pueden producirse otros riesgos, aunque son muy poco frecuentes. Entre ellos, infección, punción de un órgano interno o embolia grasa.

La recuperación de las cirugías

Entre cuál es la diferencia entre una abdominoplastia y una liposucción, el tiempo de recuperación es un factor importante a considerar. En una abdominoplastia, cuando se despierte de la operación, la incisión estará cubierta con un apósito quirúrgico. Tendrá que volver varias veces al cirujano para que se lo cambie. Su cirujano le dará una prenda de presión. Al cabo de un día deberá levantarse y caminar con ayuda, para evitar la formación de coágulos. Es probable que le receten analgésicos y antibióticos para aliviar las molestias y reducir el riesgo de infección. También es posible que tenga un drenaje quirúrgico durante dos semanas.

La fase de recuperación inicial de una abdominoplastia tarda seis semanas en pasar, y tendrá varias citas de seguimiento a lo largo del proceso para comprobar que la incisión está cicatrizando bien. Durante este tiempo, debe evitar cualquier actividad que pueda tirar de la incisión o ejercer demasiada tensión sobre ella. Huelga decir que también debe evitar cualquier actividad física extenuante o ejercicio durante el período de recuperación, hasta que su médico se lo permita.

En el caso de la liposucción, su proceso de recuperación dependerá de cuántas zonas se hayan operado y de si son necesarias sesiones adicionales. Tras la intervención, es posible que el cirujano le recomiende llevar una prenda de presión sobre el estómago, para aliviar la hinchazón y ayudar a cicatrizar la piel. La liposucción es una intervención ambulatoria, lo que significa que podrá reanudar su actividad normal en un plazo de 48 horas. A pesar de ello, debe evitar levantar objetos pesados o realizar ejercicios cardiovasculares intensos hasta que su médico lo apruebe.

Como puede verse, hay muchos factores a considerar cuando se plantea cuál es la diferencia entre una abdominoplastia y una liposucción. Pero lo más importante es pensar en las necesidades que cada paciente tiene, para elegir la mejor opción. La doctora Sophie cuenta con la trayectoria y la confianza para saber qué desea cada paciente y aconsejarla de la mejor manera. No dude en apuntar una cita para saber más.